El día de hoy Chepina
se reúne con los más de 100 obispos del país en la sede de la Conferencia del
Episcopado Mexicano (CEM), a lo que, antes de llegar a la cita, la panista
aseveró que sería un “diálogo que gracias a la democracia permite hacerlo sin
simulación con los ministros de la Iglesia católica”.
Josefina fue recibida
por el sacerdote Manuel Corral, secretario de Relaciones Públicas de la CEM,
manifestó su beneplácito por la invitación que le hicieron los obispos
encabezados por el arzobispo de Tlalnepantla, Carlos Aguiar Retes y recordó que
no es la primera ocasión que se reúne con ellos.
Pues claro que no es la
primera vez que se reúne con ellos, digo, para haberles regalado en la navidad
de 2010 a cada uno de los obispos un iPad (con un valor, en aquél entonces de 12
mil pesos por pieza) cuando se desempeñaba como diputada federal (bueno, desempeñarse,
lo que se dice desempeñarse… dejémoslo en “cuando tenía el puesto de”), regalito
que, por supuesto, salió del erario público, es porque ya traía una buena
relación con el purpurado desde hace tiempo.
Cabe mencionar que en
ese momento se aseguró que se compraron los iPads para que fueran dados a
religiosos pobres, pero por alguna extraña y desconocida razón cayeron en mano
de los obispos quienes, por cierto, no tienen ninguna obligación de vivir
regidos bajo el voto de pobreza (que el resto de los sacerdotes sí y
seguramente por ello, fue que cuando los aparatos se recibieron, se dijeron “venga
a nosotros tu reino”).
Bueno, pero regresando
al punto, en dicha reunión nuestra queridísima amiga (*ríe malévolamente*) expondrá
durante media hora algunos puntos de su plataforma política y durante una hora
escuchará preguntas e inquietudes de los ministros religiosos a quienes
responderá en “un diálogo cordial”. Claro, a ellos sí los va a escuchar (no como
a los migrantes en California, a quienes dejó con la palabra en la boca porque
le empezaron a aventar de jitomatazos [en forma retórica, muchachos] al
recriminarle políticas implementadas durante el tiempo que ostentó el puesto de
secretaria de Estado [aunque la verdad es que más parecía mera secretaría de un
Gutierritos cualquiera]), pues cómo no, si la cúpula eclesiástica es su mero
mole, poca gente en este país es tan cerrada y retrograda en su mentalidad como
el obispado. Seguramente hasta la ovacionarán de pie.
Qué pena de comunidad
religiosa, qué pena de candidata.
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